Cabeza de jabalí
Cabeza de jabalí
Obra original de Rubén Montés. Técnica mixta de acuarela y carboncillo. Ilustración incluida en el libro «Andanzas de un furtivo II» de Martín Moreno muñoz. Incluye marco y viene firmado por el autor.
La figura del jabalí está muy presente en toda la obra de Rubén Montés. Quizás por estar muy presente también en su ámbito personal. El jabalí es una especie cinegética muy apreciada por los aficionados a la caza. Su dificultad, su inteligente comportamiento y costumbres o el misterio de su caza lo hacen muy especial. Modalidades como la espera son casi exclusivas de este animal.
El anhelo de conseguir encontrarse con un gran macareno, y la escasez de ocasiones en que esto ocurre alimentan un deseo creciente. Enloquece y roba muchas horas de sueño a los cazadores que pretenden hacerse con un buen ejemplar. Por esta razón la figura del jabalí se cuela en tantos lienzos y papeles. Cual pintura rupestre de la prehistoria, puede que el autor porte n su genética representar mediante el arte las escenas de caza.
Pero no solo en la pintura deja huella el jabalí, sino que es un gran protagonista de los relatos de muchos libros de caza. Sin ir más lejos, en el primer libro de Rubén Montés “Narraciones de caza del abuelo” vemos cómo este animal tiene dedicadas muchas palabras, frases y capítulos. Algunos son reales pero otros son ficticios, expresando una vivencia imaginaria que bien podría darse en el futuro. Autor y lector se unen en una historia a través de las páginas que los lleva a un momento y lugar anhelados, fantasioso y tal vez, la antesala de una vivencia real. Y se cumpla o no, bien es cierto que en sus cabezas pasará fugazmente el viejo jabalí para emocionarlos una vez más.